martes, 31 de julio de 2007

El arte de contar, ese oficio olvidado.


Cuando asistí a mi primera clase de narración oral, no imaginé cuánto me iba a fascinar.
Para cada sesión debíamos preparar un cuento para contarlo ante el grupo. De esta manera, íbamos aprendiendo cómo se transforma un narrador o narradora, a detener la mirada en cada uno, a señalar con las manos distancias y formas, a utilizar la palabra, su tonalidad, su ritmo, para crear ambientes e implicar a los oyentes y hacerles cómplices de algún personaje.
Cuando alguien pronunciaba palabras como "hace mucho tiempo", nos desvinculábamos del tiempo, para vivir otro tiempo, otra realidad, otra dimensión: la de la imaginación y la palabra.
A todo ésto, le puse algo de mi propia cosecha, un poco de sentido del humor y ¡zas!

2 comentarios:

Consuelo dijo...

Felicitaciones Elisa! Su blog es fantástico y me ha aportado mucho. Soy una maestra bibliotecaria colombiana que hago narración oral en La Hora del Cuento, con chiquitos de Jardín Infantil y Preescolar. No manejo títeres. Pero toda su teoría me enriquece y me refresca lo que aprendí en la universidad. Podría poner un enlace de su página a mi blog? Estoy construyendo uno: Aromadepapel.blogspot.com que me placería mucho si pudiera visitar y dejarme sus comentarios. Un feedback que me ayude a mejorar. Un abrazo
Consuelo Escobar

Elisa García dijo...

Muchas gracias Consuelo por tu comentario. Me alegra muchísimo que este blog y lo que en él escribo ayude y anime a otras personas a contar cuentos a los niños.
Otro abrazo para tí.