jueves, 14 de mayo de 2009

Casiopea y la madrastra de Blancanieves.


Hoy nos toca hablar de los guiones, en concreto de el de nuestro nuevo e inminente espectáculo Guille y las estrellas.

Los expertos en el tema dicen que un guión tiene dos tramas entrelazadas: la principal, que es la que nos llega directamente o a simple vista y la secundaria (según algunos la más importante), que corre a lo largo de toda la historia, pero que queda en un segundo plano.

En Guille y las estrellas nuestra trama principal sería la historia de un niño cualquiera, que vive en una ciudad cualquiera, pero eso sí, con un abuelo muy especial, ya que el anciano posee los conocimientos necesarios para observar y descifrar el Universo, nuestro cielo.

Es en la trama secundaria donde he dado rienda suelta a toda mi imaginación, entrelazando la mitología griega y los cuentos populares. Guille sueña con el mito de Casiopea, pero en su sueño la bella se parece mucho a la madrastra de Blancanieves por su vanidad y orgullo, origen del nudo de esta historia cuyo desenlace no quiero desvelar, por ahora.

Son muchos los estudiosos que ven una relación entre los mitos y los cuentos populares. En ambos, encontramos personajes extraordinarios que recorren mundos no menos espectaculares, eliminando monstruos que encuentran en los lugares que visitan y que en definitiva, actúan de un modo ejemplar. Sin embargo, el mito se distingue del cuento, en cuanto el primero se percibe como un hecho real y el segundo como inventado.

Y puestos a inventar, no esperen un cuento clásico con Guille y las estrellas, porque en él encontrarán múltiples sorpresas con las que intentaré divertir y hacer pensar.

Por todo esto, es por lo que he escogido para representar la historia de Casiopea a los pupis. Muñecos muy parecidos en su construcción a las marionetas de hilo, pero cuya manipulación es mucho más simple, utilizados originariamente para narrar historias épicas y donde lo que se cuenta, es más importante que la destreza del manipulador.

En la foto podemos ver a los personajes de este cuento: Cefeo el rey, Casiopea, Perseo el héroe, Andrómeda y por último, la bruja del oráculo.

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